Hijo de Zeus y Leto, y hermano gemelo de Artemisa, Apolo nació en la isla de Delos. Su madre, temerosa de la venganza de la esposa de Zeus, Hera, había elegido la estéril isla de Delos como el refugio más seguro que podía encontrar.
Se dice que al probar por primera vez la ambrosía, se transformó inmediatamente de bebé a hombre. A Apolo se le dio entonces su arco, hecho por el maestro artesano del monte Olimpo, Hefesto.
Es descrito como el dios de las artes, del arco y la flecha, la curación y las plagas que amenazaba o protegía desde lo alto de los cielos, siendo identificado con la luz de la verdad. Era temido por los otros dioses y solamente su padre y su madre podían contenerlo.
Es el dios de la muerte súbita, de las plagas y enfermedades, pero también el dios de la curación y de la protección contra las fuerzas malignas. Además, es el dios de la belleza, de la perfección, de la armonía, del equilibrio y de la razón, el iniciador de los jóvenes en el mundo de los adultos, estaba conectado a la naturaleza, a las hierbas y a los rebaños, y es protector de los pastores, marineros y arqueros.